"UN PAPÁ CON DELANTAL", UN CUENTO QUE A TRAVÉS DEL HUMOR INVITA A REPARTIRSE LAS TAREAS DEL HOGAR DE FORMA IGUALITARIA ENTRE HOMBRES Y MUJERES
La historia gira
alrededor de la igualdad de género, más específicamente, la igualdad en
la distribución de las tareas domésticas entre hombres y mujeres.
Problemática con la que hay que continuar trabajando y mucho, ya que más
allá de las lindas consignas de igualdad y de nuestras luchas, todavía estamos
muy lejos de que se dé en nuestro transcurrir diario. La
historia, en clave de humor, y contada a través de los ojos de una
niña, invita a cuestionarnos la división de algunos roles arcaicos que
todavía existen entre hombres y mujeres. Y a poder ver las
diferentes formas en que algunas mujeres y hombres criamos a nuestros
niños de nuestras niñas.
El libro “Un papá con delantal”, ya que es una muy buena herramienta educativa en favor de la Igualdad, y cuenta con una Guía de actividades supervisada -al igual que el libro- por la Licenciada en Educación, Ivana Rugini, para trabajar en los colegios, instituciones y los mismos hogares.
En España, debido a la buena recepción que tuvo, fue incluido en varias Guías de Igualdad, y ya va por la segunda edición. Y con motivo de la celebración del Día del Libro 2021, la Concejalía de Igualdad de Castilla-La Mancha, a través del Centro de la Mujer, hizo entrega de dos cuentos con contenido educativo igualitario a todos los centros escolares de educación Primaria que participan en el proyecto coeducativo “La Igualdad en mi Escuela”.
La contratapa de "Un papá con delantal" dice así:
"¡A que no lo
sabéis! En casa, en lugar de una señora que nos ayuda con
los quehaceres del hogar, tenemos un hombre que usa delantal. Se
llama Amador, lo contrató mamá y lo sabe hacer todo. Pasa el trapo
rapidísimo, como si bailara, limpia los muebles y deja los azulejos
brillantes. Compra comida ecológica y a buen precio, lava y plancha
como nadie, y conoce un montón de trucos. Desde que llegó ha
revolucionado tota la casa... y también a los que vivimos
en ella. Sobre todo, a papá y a Santi, mi hermano. ‘Amador,
eres mi ídolo, tú sí que llevas el delantal bien puesto’, le digo yo.
Mamá le dice: ‘¿Por qué no te conocí antes?’. Y papá y Santi,
¿qué dicen?"
Me gustó jugar
con la idea de que sea un señor que usa delantal a quien la mamá contrata para
hacer las tareas de la casa, porque es algo que no pasa en la realidad. En
general, todas las personas que uno contrata para trabajar limpiando las casas
son mujeres. Y a decir verdad, no son muchos los hombres que barren, pasan
el trapo, hacen las camas, limpian los vidrios, lavan la ropa, ordenan la casa,
hacen las tareas con las hijas y los hijos, los llevan al médico... La mayoría
las seguimos haciendo las mujeres, además de salir a trabajar.
Suelo ir a
contarlo a los colegios para las jornadas ESI. Donde luego de hacerles
preguntas como: “En sus casas, ¿quién hace las compras? ¿Quién lava los platos?
¿Quién cambia las bombitas de luz? ¿Quién saca a hacer sus necesidades al
perro? ¿Quién friega los pisos? ¿Quién cuelga los cuadros? ¿Quién lava la
ropa?, etc., etc., y en donde las respuestas son obvias, en su mayoría lo hacen
las mujeres. Hablamos sobre igualdad, sobre profesiones, oficios y hasta
colores, que los colores no tienen dueño, son de todas y todos y para todas.
Magela Demarco, periodista y escritora
Soy mamá
de un gordo de 10 años y la hermana mayor de un hermano de 38, a quien mi mamá
no le pide ni el 10% de las cosas que me pide a mí =). Y en Argentina, más allá
de las lindas consignas de igualdad y de nuestras luchas, todavía
estamos muy lejos de que se dé en nuestro transcurrir diario.
#RevistaOccidental
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